Josefina Arrabal Poesia en Jueves Santo.
La puesta en escena de la Semana Santa con sus procesiones, desfiles y cortejos sin lugar a dudas trasmite muchos sentimientos y emociones a veces encontrados: pasión, fervor, religiosidad, espectacularidad, nostalgia… que son expresados a través de la música, el cante, los aplausos, el recogimiento o el silencio respetuoso e introspectivo.
Si la Semana Santa en Valladolid es en si misma un Museo itinerante a paso lento y acompasado, son muchas las manifestaciones pictóricas o artísticas que se han rendido a la belleza y patetismo de sus imágenes para expresar a través de su obra su admiración y homenaje a los grandes imagineros que de un tronco de madera fueron capaces de realizar obras de arte insuperables y anatómicamente perfectas. Creando escenas plenas de realismo, sentimiento, emoción y sufrimiento no exentas de ternura.
La poesía como armonía de la palabra dicha y verbo escrito acompasado, no podía permanecer impasible ante tanta belleza latente y necesariamente tenía que plegarse a rendirle un homenaje verbal a tan magno esplendor artístico.
Josefina Arrabal, poetisa de verbo fácil, sentido y elocuente puso, el pasado Jueves Santo, la más bella letra a la imágenes, el verso más sentido los silencios y la más fervorosa estrofa a la emoción contenida.
Sin lugar a dudas la Semana Santa además de tiempo de pasión es periodo para las artes y espacio para la poesía.
Carlos Ramírez.